27 septiembre, 2015

Una ventana

Un blog, una cuenta pública en instagram... Son ventanas que abrimos al exterior. Hacia la calle, o con vistas al patio, al jardín, a una escalera, a un pozo de luz, vestidas con cortinas, con estores venecianos, desnudas, acompañadas de postigos, con la persiana medio subida, medio bajada, algunas reciben luz todo el día, hay quién solo las abre de noche o quien sólo enseña oscuridad ... Cada uno en este mundo virtual viste su ventana como le da la gana pero imaginar su casa según la ventana que abre es reductor. Hay gente que imagina nuestra vida por lo que enseño en instagram, pero hay tantas otras cosas que no aparecen ahí y que son tan importantes... Instagram sigue aportándome monerías, bonitos momentos, buena gente, pero a mí me cuesta aportar algo que me interese contar, bueno siempre podría poner foto de mis gallis, que son quienes de verdad tienen tirón pero no me apetece mostrar cada uno de sus movimientos, porque no tengo tiempo para hacer tantas fotos ni para comentarlo.

A veces publico una foto cuando en el fondo lo que más me apetecería sería poder charlar de ello con una amiga. Suelo publicar cualquier cosa por pasar el rato de mis comidas entre semana o de sus siestas durante el fin de semana. Si pienso en las últimas dos semanas y en los momentos que quisiera recordar, ninguno de ellos está en mis fotos de instagram. Muchos de esos momentos son compartidos con más gente en los que no suelo estar con el móvil encima; como por ejemplo la visita del "primito" Bastian que vive en Canadá y que llevábamos 3 años sin ver, que fue un momentazo, celebrar el séptimo cumpleaños del primo Edgar, jugar en el parque con la prima Lucie, llevarme a María a cenar a casa de unos amigos, mientras Carmen pasaba la soirée con su padre... Otros son instantes familiares difíciles de recoger en imágenes;  sentimientos, pasos titubeantes, carreras, llantos, despertares, juegos, risas...


                                

La reflexión la empecé el sábado, íbamos a comer, acostamos a las gallis y después de poner la mesa me dispuse a hacer la siguiente foto:

                  

El franchute me dijo, tu vas encore publier une photo? Le cuesta entender mi atracción por instagram y la gente tan especial que sigo o nos sigue. En el fondo tiene razón, qué sentido tenía publicar esta imagen o cualquier otra... ¿qué habría conseguido transmitir? Poca cosa. Que me encanta poner estos mantelitos de colores del Tiger, que comimos pasta con pesto, que corté albahaca fresca, que teníamos flores frescas en casa... 

Todo insulso, cuando en realidad para mí ese momento estuvo cargado de sentido. Después de una semana donde las dos habían estado tosiendo y con laringitis, donde cada despertar nocturno iba acompañado de algún reproche (cógela, haz rápido el biberón, sácala de la habitación, no calientes la leche que le da más tos ?!!, deberías haberle dado el antibiótico...) la comida del sábado fue el momento de volver a reconectar. Él apareció con las flores cuando vino de comprar, podría haber traído un bollo o cualquier otra cosa que sabe que me gusta (el tomate frito me hace sentir siempre especial!) pero lo que venía cargado de buenas intenciones fueron sus palabras, "pour cette semaine où l'on n'a pas su se parler", algo así como, esta semana no hemos sabido hablarnos... Me encantó que él también se diera cuenta y que lo dijese. Publicar la foto con nuestra comida del sábado no hubiera supuesto nada para nadie. Acompañar la foto de un pie de texto con toda la explicación carecía de sentido en Ig, pero he seguido pensando en ello durante el fin de semana y lo cierto es que me gusta poder volver al blog para escribir con tranquilidad y contar n'importe quoi, que para eso éste es mi espacio sin incrustarme en ningún hilo de actualidad.

Gracias por seguir leyéndome, no soy muy asidua, pero vosotros sí. 





22 septiembre, 2015

Lectureando

Si el 2013 fue un año bastante provechoso en lo que a lecturas se refiere ( buena cuenta de ello está reflejado en la pestaña ya démodée del Reto lector 2103 ), 2014 fue algo desierto de interés lector. Mi concentración durante el embarazo resultó nula excepto para lecturas que tuvieran que ver con los bebés y la maternidad, con el nacimiento de las gallis tuve cero tiempo y una vez de vuelta al trabajo lo que me faltaba era la energía. 

En el 2015 retomé las ganas de leer, pero hasta que no llegó agosto no pude devorar libros que es como me gusta disfrutarlos. Admiro a la gente que tiene por rutina leer 15/20 ó 30 minutos cada noche porque yo no sé lo que son los tiempos impartidos. Me gusta empezar a leer y no dejar de hacerlo hasta que me duelen los ojos, se me cansa el brazo o hasta que acabo rendida. 

Los 6 días en Lanzarote fueron un bonito destino en pareja, volvimos a dormir del tirón, a cenar y comer fuera, a dejar que el ritmo del día se impusiera a nosotros sin previsiones, pero una de las cosas que más disfruté, hasta me he cansado de repertirlo, fue lo bien que me sentaron las horas que pude leer sin interrupción alguna. 



La verdad sobre el caso Harry Quebert, que llevaba en casa desde que salió en formato de bolsillo hace meses, viajó desde Niza hasta el pueblo y del pueblo a Canarias. Resultó ser un compañero ideal en la playa, tanto, que cuando el franchute se cansaba de arena y me dejaba sola con él, hasta me hacía feliz. 

Cuando se me acabó su compañía tuve que buscarme un substituto y ohhh... Me encontré con un viejo noviete, Pérez-Reverte y su última novela, Hombres buenos, que me ha dejó bien satisfecha como siempre. Un condensado de metaliteratura, historia, París, aventura y fe vs razón... Una ola por ese sillón T de la RAE.



Empecé septiembre con la Trilogía del Baztán, me he leído el primero y bueno, entretenido está pero no me apasiona la novela negra, ni la fantasía, así que me cuesta motivarme para empezar el segundo tomo.

Tengo una Fnac a escasos 200 metros del trabajo así que suelo pasar a menudo y esta semana he visto que sale publicado el próximo libro de Joël Dicker. "Le livre des Baltimore" Por lo que dice la prensa y los ejemplares ya reservados se prevee que sea otro éxito de ventas. Marcus Goldman, el joven escritor del caso Harry Quebert busca la inspiración para escribir otro libro y el autor aprovecha para narrar la juventud de su personaje, sin búsqueda de asesino porque la intriga esta vez no se encuentra ahí. 



Aprovechando el tirón mediático, estaba destacada la primera obra del escritor suizo y me la he comprado, ha sido por impulso al leer en la contraportada que es una novela con espías ingleses, romance y suspense durante la segunda Guerra Mundial. También me ha tentado una novela sobre la amistad de 4 mujeres afroamericanas, dicen que tiene un aire de Criadas y señoras, que me encantó, así que voy a estar entretenida los próximos días... 

¿Y ahora que sabéis por donde van mis tiros tenéis alguna recomendación que tenga que incluir en la wishlist de finales de año? 




15 septiembre, 2015

À l'instant t

Le jour J, l'heure H... Se entienden perfectamente..  Mais l'instant T? 

Reconozco que me costó encontrarle el significado a la expresión, se puede traducir por "en ese/este mismo instante temporal" en ese/este mismo momento tiempo"... La T es el tiempo, en el instante tiempo... Como la n es número, en matemáticas... 

Pues en el instante temporal en el que que escribo, el franchute está viendo L'affaire Farewelĺ por octava vez. No sé vosotros pero a mí me cuesta volver a ver una peli, excepto con Pretty Woman claro está (vista cincuenta veces, creo que es la única película que he visto en español, inglés y francés y que vería en ruso si se diera el caso). 

Así que me he puesto a lavar los pinceles de maquillaje, en verano también estuvieron de vacaciones pero los biberones de madrugada  madrugones, no perdonan y cada mañana ahora me hacen falta unos minutillos de puesta a punto.
Y de los pinceles de los bb creams, antiojeras, colorete y demás bobadas, a algo más artístico para comentaros que volví a ver por segunda vez la exposición del verano en el Grimaldi Forum, De Chagall à Malevitch, la révolution des avant-gardes e hice mi propia selección de fotos con una aplicación que tenían allí y que luego publicaban en Facebook. Os dejo aquí algunas de las obras que más me gustaron y que llevo ahora en el salvapantallas del móvil. He tenido muchos meses a las gallis, pero esos nanosegundos de visualización eran a veces muy crueles así que este verano puse una foto de una Virgen del Carmen preciosa y ahora coloreo mis pantallazos con Kandinsky.

Mon accrochage particulier





A l'instant t desde el sofá

À bientôt!


02 septiembre, 2015

A galeras a remar

"Mi primo que tiene un bar desde siempre me ha dicho;
y me consta que todo lo dice de muy buena fe,
tanto tienes tanto vales, no se puede remediar,
si eres de los que no tienes a galeras a remar..."

¿Ya? ¿La tenéis ya metida en la cabeza?

Llevo con ella unos días y me he dado cuenta además de una cosa, la palabra galera/s en español solo la pienso o la utilizo con esta canción, porque hace años, décadas, que no veo una peli de romanos....

En francés sin embargo se recurre a menudo al término de galera. Quien más quien menos se ve inmerso en alguna... Casi siempre en singular: c'est la galère, mais quelle galère, nous sommes en galère... Cuando algo resulta complicado, fastidioso... como volver a aclimatarse a los horarios con dos mellizas de casi 16 meses que han vivido como salvajes, en el buen sentido de plena libertad y disfrute, durante 4 semanas. Solo estaban bajo techo para dormir y los ratos de 6 Hermanas mientras la agüela se tomaba el sintrom...

El patio, el porche, la matro-natación, el río,las tías, los primos, la tienda, los brazos, el perro, la jarana, los amigos...

Y ahora quiero que todo vuelva al orden que respetábamos hasta que llegó el 1 de agosto, y que después del baño y la cena se duerman tranquila y rápidamente ja

ja 

ja

La calidad de la imágenes es pésima poque todas han sido hechas con el móvil, pero suficiente para mostrar el caleidoscopio de este verano 2015, aún hay más en instagram con el hashtag #segundoveranoenelpueblomodoon ...