Una talla más y un pijama menos

Cuando empecé este blog no pensaba darle una temática en particular y según el momento las entradas han ido apareciendo sin mucha organización. Ahora que el papel de alimentadora, cuidadora y besuqueadora me tiene copadas 23 de las 24 horas del día, resulta difícil encontrar otro tema, otra inspiración que no sean las dos gallifantas. Y tan feliz.

Desde el primer momento las diferencias físicas de mi par de mellizas han estado muy marcadas, una para el padre y otra para la madre nos dijeron en el hospital... Y además de las físicas, día a día vamos descubriendo otras. Cada una de ellas tiene por ejemplo un despertar propio, más directo y que pasa del sueño a la realidad el de Carmencita mientras que María necesita una taza de café y un vuelta entera de informativos para entonarse y tomar contacto con lo que la rodea... 

Cada una ha tirado su ombligo a su momento y ni éste les ha quedado igual. Y hasta están usando diferentes pijamas, M va por delante en talla y está estrenando muchos de ellos, C viene detrás recuperándolos y uno de los que más le habíamos puesto anoche ya dejó de valerle... Se trata del verde de rayas con el que le hicimos estas fotos en el hospital, así que supongo que mi "niña chiquitita" como la he estado llamando ha dejado de ser lo más chiquitita que será nunca y ya le sigue la pista en centímetros y outfits a su hermana.